Un trabajo de un tal Von Brandis, quien tras buscar fotografías pornográficas de los años 70, sustituyó a las parejas protagonistas por espacios en blanco. Así, mediante la "autocensura" del autor, es el observador quien da forma a la imagen, y es por tanto su mente la que delimita la línea entre arte, erotismo y pornografía.
No paras de sorprendernos Victor...jeje
ResponderEliminarSaludos!
Mucho más sensual que verlo todo con pelos y señales. Interesante trabajo, sí señor.
ResponderEliminarFran: De eso se trata. Al menos en parte.
ResponderEliminarOllie: Tiene su rollo, sí.
Hoy en día ya se ven pocos pelos ... pero bueno.El artista es original , desde luego
ResponderEliminarFavoritasupreme: el porno ya no es lo que era
ResponderEliminar:(