5.7.12

La historia de una camiseta.

Aunque más que la historia de una camiseta, es la historia de LA camiseta. Aquella con la que el mítico Micky Dora participó en el Duke Kahanamoku Invitational Surfing Champioship de 1967, en Sunset Beach, Hawaii.


La cosa empieza con un tipo llamado Jeff Hight y su novia en el Malibú de 1968. A Jeff, a partir de ahora, le llamaremos El Afortunado, ya entenderéis por qué. Una mañana de ese año estaban los dos en la playa tomando el sol y viendo un poco de surf cuando de repente llega Micky Dora, se cambia al lado de ellos, se acerca y les dice textualmete: "Hey kid, watch my stuff for me, will ya?", algo así como: "Quillo, échale un ojo a mis cosas, ¿vale?". El Afortunado y su chica asienten con la boca abierta mientras Micky se va al agua. Los dos se quedan flipando por estar guardándole las cosas a "Da Cat", quien por aquella época ya era lo más parecido a un héroe para los surfistas californianos.


El caso es que Micky pierde la noción del tiempo en el agua -como todo buen surfista- y cuando sale se da cuenta de que ha pasado más de medio día. Apurado, se acerca al lugar donde dejó sus cosas y allí estaban, aún pasmados, nuestros dos amigos. Tras darles las gracias por haber esperado tanto tiempo, Micky coge LA camiseta, se la lanza al Afortunado y le dice: "Keep it!", "Pa' ti". No puedo ni imaginar los dos lagrimones que le caerían por las mejillas a ese chaval ante semejante regalo.


Tras guardarla en su casa durante años, nuestro amigo El Afortunado, en un arranque de humanidad, pensó que la camiseta debería estar a la vista de todos. Contactó con Cary Weiss, uno de los mayores coleccionistas de surf de Estados Unidos, y juntos acordaron que el mejor sitio para este pedacito de historia del surf era el restaurante "Duke´s" de Malibú, donde descansa en una de sus paredes desde 2004.


Así que ya sabéis, estad siempre dispuestos a vigilar las cosas de la gente en la playa. Quizás algún día os lo pida una legenda del surf.








4 comentarios:

Fran dijo...

Ostias Victor que historia mas chula!!!

Víctor. dijo...

A mí me flipó.

Algún día os contaré la historia de la tarde en que asusté a Kelly Slater.

Anónimo dijo...

que buena si señor. a micky dora se le nombra en un librote que tengo por aquí del gran leroy grannis.

Víctor. dijo...

Qué gran libro. Yo se lo regalé a mi mejor amigo, pero me quiero comprar otro para mí. Es un indispensable.

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